Puerto Príncipe está lleno de niños huérfanos y sin identidad. Los pequeños llegan solos y heridos hasta los hospitales sin que nadie se haga cargo de ellos.

19 de enero de 2010. EFE. PUERTO PRÍNCIPE


UNICEF ha alertado desde Puerto Príncipe de la situación que están viviendo muchos niños haitianos que han sobrevivido al terremoto, pero en los que se une la falta de datos para poder identificarlos o buscar a sus familiares, si es que no han muerto, y el trauma psicológico que les quedará de por vida. A través de un comunicado fechado en Puerto Príncipe, miembros de UNICEF han relatado el caso una niña de dos años y un niño de siete que se encuentran en uno de los hospitales habilitados por la Misión de Paz de Naciones Unidas, sin heridas físicas, pero con los que no se sabe qué hacer con ellos. La pequeña de dos años tiene parálisis cerebral y llegó al hospital deshidratada y en estado de shock.

"Está tumbada en la camilla, llorando y sola, no tiene heridas graves y se podría ir a casa, pero nadie sabe cómo se llama ni por dónde empezar a buscar a su familia. Solo tiene un papel a sus pies que dice ‘niña’”, relatan los miembros de UNICEF.

En el mismo hospital se en¬cuentra Sean, de siete años, que llegó gritando al hospital, aunque solo tiene arañazos, y estuvo do¬ce horas en posición fetal. Según UNICEF, las enfermeras han dicho que el pequeño ha contado que sus padres están muertos. Los doctores no les quieren dar el alta sin saber quién se encargará de ellos, señala esta organización humanitaria, que está intentando establecer dos refugios para niños como Sean y la “niña”, en los que se les pueda atender mientras se busca a sus familias.